Datos sobre la ruta de tren Plasencia - Petrel. El gran estado de las líneas férreas y su fiabilidad convierten al tren en uno de los sistemas de transporte más seguros para recorrer la distancia que separa en tren Plasencia de Petrel.
En la distacia que separa Plasencia de Petrel nuestros pasajeros pueden descansar disfrutando del viaje tan solo por la cantidad de 43,75€, sin duda un precio muy competitivo que satisfará los bolsillos de toda clase de pasajeros. El precio ofrecido es aproximado y puede verse alterado por distintas ofertas o promociones o factores como la disponibilidad de plazas.
De acuerdo con nuestra base de datos la mejor conexión para ir desde Plasencia a Petrel pasa por Madrid y Villena. Echa un vistazo a la ruta que te proponemos para este viaje. Para cada uno de los viajes de tren te mostramos todos los horarios disponibles.
Plasencia
Madrid - Atocha Cercanias
2h 42m
19,1€
Renfe
Plasencia
Madrid - Atocha Cercanias
2h 57m
19,1€
Renfe
Plasencia
Madrid - Atocha Cercanias
2h 57m
22,5€
Renfe
Plasencia
Madrid - Atocha Cercanias
2h 47m
22,5€
Renfe
Madrid - Atocha Cercanias
Villena
3h 53m
26,65€
Renfe
Madrid-Puerta De Atocha
Villena
2h 37m
34,5€
Renfe
Madrid - Atocha Cercanias
Villena
3h 56m
26,15€
Renfe
Madrid-Puerta De Atocha
Villena
3h 10m
24,65€
Renfe
Puede encontrar la información más precisa para el trayecto Villena - Petrel pulsando aquí
Dentro de la provincia de Cáceres encontramos la ciudad extremeña de Plasencia. Rodeada de una naturaleza exuberante cuenta con múltiples edificios históricos entre los que destacan sus murallas con varias puertas muy bellas, sus dos Catedrales, la vieja y la nueva, su famoso acueducto con los Arcos de San Antón, su Palacio Episcopal o la Iglesia de San Martín que consta con un bello retablo. Dentro de sus fiestas típicas destacan la del Martes Mayor y su espectacular Semana Santa.
Petrer es un pequeño municipio alicantino que se encuentra en la Comunidad Valenciana. Famoso por su historia entre su patrimonio su principal referente es su castillo-fortaleza del siglo XII, pero también cuenta con sus curiosas casa-cueva, así como con el Acueducto de San Rafael y la Iglesia de San Bartolomé. Al visitarlo resuelta imprescindible probar su plato típico, el arroz con conejo y caracoles, de la misma forma destacan sus coloridas y famosas fiestas de Moros y Cristianos.